El mejor producto que puedes vender:
¡Tu marca personal!
Fuente de publicación digoMARKETING | 15 jul 2014. Por Gea Suzaña
– Habla con seguridad:¿Suena obvio no? Pues no lo es, con frecuencia por timidez, inseguridad o vergüenza no hablamos con el dominio real que tenemos sobre un tema determinado. Puede que nadie sepa quién eres ni que haces pero la actitud y posición que tengas lo es todo a la hora de que seas tomado en cuenta para algo. Esto se aplica de igual manera en las redes sociales, si quieres dar tu opinión sobre un tema: ¡Hazlo! Pero hazlo porque realmente crees que tienes algo interesante que aportar. Recuerda que tienes una marca personal que es la reputación, actitud y personalidad que proyectas y eso es lo que la gente realmente recuerda de ti.
– Muestra solo lo que quieras que sepan: Todos tenemos vidas privadas y asuntos que no queremos la ciudad se entere. Entonces, ¡NO LO PUBLIQUES! Sé que los videos que andan en las redes sobre la privacidad en las redes sociales puedes parecer exagerados, pero tanto tu que estás leyendo esto como yo, sabemos que a la hora de querer saber algo de alguien, lo primero que hacemos es leer sus estados en Facebook, ver sus fotos en instagram. Piensa cual es la imagen que le quieres dar al departamento de recursos humanos de la empresa que estas aplicando, hasta tu exnovio/a que entra a ver como sigues. ¿Te gustaría que vieran lo más íntimo de ti? Por mas divertidas que te parezcan estas acciones, ponen tu marca personal en juego.
¿Te has preguntado alguna vez por que las personas más talentosas no necesariamente son las más exitosas en sus respectivas áreas?
El Internet y el poder de conectar personas puede ser un arma de doble filo; es una herramienta infalible para demostrar tu capacidad, sobre todo por el alcance que tiene a un costo prácticamente nulo, pero al mismo tiempo, ha tenido la capacidad de hacer personas que no necesariamente tienen algún tipo de talento o algo positivo que aportar, en personas “influyentes”. Pero, como de todo se puede aprender; hay cosas que podemos destacar de estos tipos de personas.
¿Cuál es el truco?
Aunque suene superficial, hay que reconocer que la imagen con la que nos proyectamos juega un papel primordial a la hora de presentarte. Y no me refiero solo a lo físico, sino a la línea de comunicación, la actitud y la seguridad que demostramos hacia los demás. ¿Realmente son las personas que admiramos las indicadas para influenciarnos en determinados temas? Si ya tenemos el talento y el conocimiento, ¿Que nos hace falta para ser exitosos en nuestras carreras? Aquí resumo los 5 puntos clave que estoy aprendiendo en el proceso y poniéndolos en práctica:


– Valora tu trabajo: Nadie más que tú sabe los sacrificios, las horas de estudios y noches en velas que te tomaron adquirir los conocimientos que tienes. ¿Por qué no valorarlo? Todos tenemos fortalezas y talentos, y nadie va a creer en ellos si no lo haces tú primero. No tengas miedo de ponerle un precio justo a tus servicios; y aprende a mantener tu posición. Recuerda que las personas concebimos lo muy económico como algo “poco profesional” o de “baja calidad. Mi padre siempre me motivó con una frase especial: “En lo que seas que decidas trabajar, trata de estar siempre entre los mejores”.
– Conecta con personas iguales que tu: Por eso no pasa de moda el refrán “Dime con quién andas y te diré quien eres” Aprende a ver a las demás personas de tu área como colegas, no rivales. Siempre es bueno mantener las buenas relaciones. En determinado momento puede que esas personas sean tu competencia, pero nunca sabrás en que momento se pueden volver tus aliados. Se humilde, mantén siempre la disposición de aprender de los bueno y de los no tan buenos. Otro punto importante, interésate por la gente; puedes conseguir mas en dos meses interesándote en alguien que en dos años tratando de que se interesen en ti. Haz conexiones, pero cuando sea necesario dale un respiro al celular y experimenta lo bien que se siente interactuar en persona.
– Comparte lo que sabes. De eso se trata conectar con las personas, los demás te aprecian por lo que le puedes aportar. ¡Comparte!El conocimiento no se pierde por compartirlo. Eso sí, comparte conocimientos de temas que realmente te apasionen, tal vez tus opiniones no sean la verdad absoluta, pero al estar involucrado en el tema, los demás te empiezan a posicionar en su mente y a relacionarte con él.